9.25.2005

L A C U L P A I N T R O Y E C T A ©

‘DEL HOLOCAUSTO JUDÍO AL BAILE DE LOS CUARENTA Y UNO’
Renato Marcelo Osses Leyton


“La forma en que se sufre la discriminación
por motivos de raza, sexo, religión,
discapacidad, varía de manera considerable.
El factor común es el daño que se
inflige a la dignidad de las personas como
consecuencia de su pertenencia a
ciertos grupos. En el caso de gays y
las lesbianas, la historia y la experiencia
nos enseñan que el daño mayor no
surge tanto de la pobreza o de la
impotencia, sino de la invisibilidad.
Es la contaminación del deseo, la atribución
de perversidad y de vergüenza de
un afecto físico espontáneo,
la prohibición de la expresión del amor, la
negación de la plena ciudadanía
moral en la sociedad por ser uno quien es, lo
que vulnera la dignidad y los derechos de un grupo” (1)
Basándome en la exposición del seminario temático: ‘El antisemitismo, prehistoria del totalitarismo’, estableceré elementos comunes entre dos realidades: la del pueblo judío durante el holocausto y la cultura de la homosexualidad (2).

La primera premisa que sostiene Hannah Arendt es que ‘la intolerancia racial – y yo agregaría la sexual o cualquiera de otro tipo- no termina necesariamente con el exterminio del otro’, para que una cultura distinta sea eliminada deben presentarse factores coadyuvantes. Se deduce de este modo, que el pueblo judío, a partir de su pasividad manifestada en la no rebelión, e incluso en colaboración con la estructura nazi, facilitó de alguna forma su exterminio masivo. En México se cometen más de cien crímenes anuales por homofobia, en el Distrito Federal la cifra es de dos a tres personas por mes; son hombres jóvenes, entre 20 y 40 años, con una esperanza de vida estimada de 45 años más que no alcanzan a vivir (3).

(1) Amnistía Internacional (2001) . Crímenes de odio, conspiración de silencio. Tortura y malos tratos basados en la identidad sexual.

(2) Entiendo por cultura homosexual una cosmovisión, una manera de sentir y de actuar distinta en muchos aspectos del modelo heterosexista hegemónico.

(3) Comisión Mexicana de Lucha contra el Sida (2004).


Estas cifras no aparecen en los medios masivos de comunicación, la Comisión de Derechos Humanos no recibe mayores quejas al respecto, la comunidad GLBT muchas veces no puede tomar cartas en el asunto porque son los propios afectados los que desisten en la denuncia, hay ‘complicidad’ en el exterminio de las personas homosexuales (4).

Un segundo aspecto lo constituye el prejuicio, aquella explicación ante lo desconocido o ignorado de carácter peyorativo, que al ser tantas veces repetida en una cultura luego se da por cierta o se convierte en estereotipo. Entre éstos están: ‘los judíos eran odiados por el poder adquirido en Europa’, ‘los alemanes odiaban a los judíos porque éstos los subyugaban económicamente’, ‘el odio a los judíos fue llevado al extremo de la solución final’. Desde la época de la emancipación de las colonias americanas los judíos comenzaron a emigrar a América, su posición en la Europa Central se veía amenazada por explosiones de antisemitismo en Alemania, Francia, Austria y Hungría, así como por la persecución sufrida en la Europa Oriental; hacia 1880 había doscientos cincuenta mil judíos viviendo en E.E.U.U. y en los próximos cuarenta años llegarían tres millones más, en Argentina grupos de judíos arribarían a partir de 1868, en tanto que en México llegaron a las zonas de Puebla y Yucatán (5). Como vemos, la posición de los semitas en Europa distaba mucho de ser precisamente hegemónica en el momento del holocausto.

En México, pocas prácticas discriminatorias gozan de mayor impunidad social que el rechazo a la expresión de la homosexualidad, lo que es demostración de los fuertes prejuicios que existen contra esta comunidad y que son validados socialmente. En una encuesta realizada por el IFE (1999) sobre valores de convivencia ciudadana y democracia, se le preguntó a los mexican@s: ¿ Estaría usted dispuesto(a) a que en su casa vivieran personas: de otra raza (un 39, 8 % dijo que NO ), de ideas políticas distintas (un 44,5 % manifestó que NO ), de otra religión (un 48,1 % señaló que NO ), enfermas de SIDA ( un 57,5 % manifestó rechazo ), homosexuales ( un 66,5 % se negó a convivir con ellos ). (6)

(4) Esto nos habla de una homofobia introyecta al interior de la comunidad GLBT.
(5) Los judíos también llegaron a Brasil, de donde fueron expulsados y luego regresaron. Sin embargo las mayores colonias americanas se formaron en E.E.U.U. y Argentina. Fuente:Encarta (2000) Microsoft.

(6) Meyemberg, Yolanda (1999). Encuesta nacional de valores ciudadanos y cultura de la democracia en México. Reglas, Instituciones y Valores de la Democracia. Tomo I, Instituto Federal Electoral , México.

Como tercer aspecto consideremos el éxodo silencioso de las comunidades; ante la amenaza del medio social y la negación de mi persona surge la hégira en procura de la tierra prometida. Dilatada experiencia al respecto posee el pueblo judío: el éxodo, la diáspora, de Judea a Egipto, Babilonia, Grecia, expulsados de España, Rusia, Europa, los seguidores de Yahvé pensaron que la única solución para el problema del antisemitismo estaba en la creación de un estado nacional judío, objetivo al que encaminó esfuerzos el sionismo político en la conformación y afianzamiento del estado de Israel (1948).

En el caso de las personas homosexuales, la intolerancia y la discriminación homofóbicas, la falta de espacios donde proyectarse como profesionales y vivir su vida de acuerdo con sus parámetros, ocasiona un éxodo silencioso de los pequeños poblados hacia las grandes urbes y hacia la posibilidad del anonimato que ellas ofrecen; en este contexto sienten que están más protegidas y aumentan las posibilidades de vincularse con sus iguales para llevar una vida que ellos consideran normal. La Comisión Canadiense de Inmigración y Refugiados ha aceptado a seiscientos mexicanos que han solicitado asilo migratorio a ese país argumentando persecución por su preferencia sexual; en uno de los casos la comisión investigadora y el tribunal concluyó que “las pruebas presentadas indican que el gobierno de México ha tolerado asesinatos extrajudiciales de homosexuales, y que a menudo son la policía o la milicia quienes cometen esos crímenes”(7).

En el trasfondo de las situaciones expuestas para ambos grupos humanos subyacen algunas situaciones psicológicas. Desde el discurso de los Derechos Humanos, hoy se habla de poblaciones ‘vulnerabilizadas’ para referirse a aquellas comunidades que están en condición de una mayor indefensión, desamparo, desventaja, abandono, rechazo u objeto de agresión por parte de un sector hegemónico, que las considera peyorativamente invalidando sus derechos como personas (mujeres, ancianos, niños, migrantes, indígenas, discapacitados, minorías religiosas, diversidades sexuales). En tanto que poblaciones ‘vulnerables’ son aquellas que hay introyectado su vulnerabilidad – a falta de resiliencia – incorporando elementos que estimulan su victimización (baja autoestima, autocastigo, culpa) (8).

(7) Periódico Reforma, 12 de Mayo 2000.
(8) Diplomado en Derechos Humanos y Masculinidades (2004), FUNDASIDA, C.N.D.H., INDESOL, Ciudad de México
.
Podemos utilizar ambas clasificaciones para los judíos y los homosexuales, han sido vulnerabilizados por ciertos sectores de la sociedad hasta convertirse en íconos discriminados en cada una de sus modalidades: “El antisemitismo ha sido considerado como el ejemplo más típico y categórico de intolerancia y discriminación religiosa y ha motivado una de las persecuciones más crueles (...) el antisemitismo debía ocupar en la convención sobre religión el mismo lugar que el apartheid tiene en la convención sobre discriminación racial” (9). El efecto vulnerabilizador de la homofobia, el odio-miedo irracional a todo lo diferente a la masculinidad hegemónica, queda magistralmente descrito en palabras de Didier Eribon: “En el principio hay la injuria. La que cualquier gay puede oír en un momento u otro de su vida, y que es el signo de su vulnerabilidad psicológica y social (...) El insulto me hace saber que soy una persona distinta a las demás, que no soy normal (...) es, pues, un veredicto. (...) La ‘nominación’ produce una toma de conciencia de uno mismo como ‘otro’ que los demás transforman en ‘objeto’ “ (10). Un algo del que se puede decir cualquier cosa porque le sustraigo la condición de sujeto.

Pero en el plano de lo vulnerable homosexuales y judíos somos cómplices, existe una especie de culpa introyecta que nos ha llevado a permitir numerosas injusticias y atropellos. ¿ El ‘pueblo elegido’ está condenado a errar, a ser perseguido y a padecer en busca de la tierra prometida, según lo vaticinado por Dios ? ¿ Los masculorum concubitores estamos condenados al averno por pecar contra nuestro cuerpo, Templo de Dios, como lo señala San Pablo desde el siglo I ? (11) . Tal parece que muchos piensan que sí, en el interior de sus conscientes, por lo que se necesita de un gran trabajo de resignificación para que las víctimas no se sientan responsables del victimario. Para vivir en forma plena en sociedad nos queda por delante una gran tarea que cumplir... ©

(9) Lerner, Natan (2002) Discriminación racial y religiosa en el derecho internacional. Comisión Nacional de los Derechos Humanos, México.
(10) Jus, Juris alude en latín al derecho, lo justo; por antonomasia ‘injuria’ , o como reza el sintagma latino Summa lex, summa injuria. Tomado de Eribon, Didier (2001) Reflexiones sobre la cuestión gay. Anagrama, Barcelona. Págs. 29-30.
(11) Al respecto, ver Núñez Noriega, Guillermo (1999) Sexo entre varones, Poder y Resistencia en el Campo Sexual . PUEG, México.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Te felicito amigo, siempre supe que serias un guerrero en la vida...
Daniel Delgadillo Hidalgo

Anónimo dijo...

El Presidente del Colegio Público de Abogados de Buenos Aires, Jorge Gabriel Rizzo se declaró “nazi” y lo demostró en la última asamblea de delegados. De los que lo avalaron, ya no le queda nadie, salvo unos pocos y algunos acomodados. Tendrían que dar explicaciones sus más allegados y obsecuentes: Santiago Montaña, Eugenio Cozzi, Ricardo Nissen, Daniel Fábregas, Enrique Marega, Laura Calogero, Ricardo Monner Sanz, Luis Marras (h), Julio Decoud (h). Los tres primeros ocupan cargos de importancia en los Consejos de la Magistratura y si tienen las mismas ideas discriminatorias de Jorge Rizzo deberían ser removidos del cargo. Hace tiempo que los que avalaron a Jorge Rizzo se alejaron de él por su autoritarismo, fascismo y ahora nazismo. Los nombrados deben dar explicaciones y/o renunciar a sus cargos ya.
MÓNICA VIVIANA LANG
Abogada
evargentina@yahoo.com.ar